En un pueblo llamado Veles vivía la mujer más alta del pueblo. La gente hablaba mal de ella debido a su estatura. Un día conoció amigos que la comprendían y se fue con ellos. Pasaba por las casas y ahora todos se reían con ella. Consiguió nuevos amigos y una noche se durmió en una nueva casa con una cama donde también le llevaban comida. Todos se divertían con ella. De pronto consiguió un novio y fue feliz.