El documento resume la tragedia ocurrida en Tlahuelilpan, Hidalgo en enero de 2019 cuando 68 personas murieron al explotar una toma clandestina de combustible de la que estaban extrayendo hidrocarburos. Relata que de las 81 personas lesionadas, solo 8 permanecían hospitalizadas tres años después, mientras que el gobierno federal aún no ha concluido el proceso de indemnización a los familiares de las víctimas.