El pulpo de anillos azules es uno de los animales más venenosos del planeta. Sus vistosos anillos a lo largo de todo el cuerpo envían una advertencia a posibles depredadores. La hembra pone los huevos en una pequeña cueva y los limpia y mantiene ventilados durante los tres meses que dura la incubación. Después de que nacen las crías, la madre inevitablemente muere.