El documento habla sobre la importancia de buscar a Cristo y su Iglesia cuando uno se siente triste, derrotado o sin esperanza. Señala que el mundo ofrece cosas vacías que no llenan el corazón, mientras que solo Dios puede hacerlo. Alienta al lector a dejarse moldear por Dios, quien lo ama y espera que lo deje entrar a su corazón a través de los sacramentos. El autor comparte su propia experiencia de haber encontrado a Dios a los 18 años y no arrepentirse de haber