Lúcer, un piloto de coches, estaba entrenando arduamente para lograr su objetivo de completar una vuelta en menos de 3 minutos, 14 segundos y 15 milésimas en el circuito donde competiría ese fin de semana. Con el apoyo constante de su padre y amigos, poco a poco mejoró su tiempo hasta alcanzar su meta. En la clasificación del día siguiente, logró repetir exactamente el mismo tiempo, por lo que los jueces lo colocaron en la pole position. Al día siguiente ganó la carrera con la vuelta más rápida, completándola en