Stanislav Petrov evitó una posible Tercera Guerra Mundial en 1983 cuando era oficial de inteligencia de la Unión Soviética. El sistema de alerta temprana ruso detectó el lanzamiento de varios misiles estadounidenses, pero Petrov decidió no informar a sus superiores porque creía que podía ser un error y que Estados Unidos no iniciaría una guerra nuclear con solo cinco misiles. Más tarde se descubrió que la detección fue una falsa alarma causada por una rara configuración astronómica.