El documento contrasta las características del hombre y la mujer, describiendo al hombre como la criatura más elevada que tiene supremacía a través de la fuerza, mientras que describe a la mujer como el más sublime ideal que tiene preferencia a través del derecho. Compara al hombre con un águila y la mujer con un ruiseñor, y describe que el hombre tiene una conciencia como un farol para guiar, mientras que la mujer tiene la esperanza como una estrella para salvar.