El documento describe la vida diaria de un niño llamado Juan que vive en una zona rural de Jujuy, Argentina. Juan y su familia crían cabras y vacas para subsistir y su madre cultiva maíz y papas entre las piedras. Juan camina más de dos horas diarias para asistir a la escuela rural y trabaja duro para conseguir leña para cocinar debido a la escasez de madera en la zona. Su padre a veces se va por meses para trabajar en la cosecha y así poder enviar dinero para ayudar a la familia.