Este documento propone una estrategia para hacer bajar el precio de la gasolina en España. Sugieren que los consumidores dejen de comprar gasolina en las estaciones de servicio de Repsol y Cepsa, las dos mayores petroleras del país, para presionarlas a reducir sus precios. Explica que si millones de personas se unen a esta iniciativa y compran gasolina en otros lugares, las ventas de estas empresas caerán y se verán forzadas a competir bajando sus precios, desencadenando una "guerra" entre las compañías