1. Esencialmente hermoso
Ser amada es ser esencialmente hermoso…
Es que el lunar en el hombro sea visto por él como una piedrecilla de ónix engarzada en
su piel…
Es que la cicatriz en el vientre esa un bordado de hilo de seda rosa que señala el camino
de sus besos…
Que puedas despojarte de todos los temores que da la imperfección, por que cada
centímetro de tu cuerpo es parte de su amor, por que cada una de tus células le
pertenecen…. Por que eres suya como lo son suyas sus propias manos, su propia piel,
su propio cuerpo…
Hablando de la mujer que ama, mi abuelo me dijo:
“ No es que mi pensamiento la disfrace ni la transforme…Ella es así y así la veo yo…
Son sus ondas de luz que me llegan, es su olor, su voz y su manera de moverse, las
marcas en las comisuras de sus labios, su agitación cuando camina rápido, sus enojos
repentinos, sus celos, sus ganas de que la abrace, su miedo a envejecer..
Y lo que nos pertenece….lo cuidamos…lo protegemos…lo salvamos airosamente de las
comparaciones.
Me da ternura ver como se cubre el vientre por que cree que puede parecerme ridículo.
Obviamente hay mujeres hermosas, jóvenes, perfectas, fácilmente abordables…pero
solo las veo, no las miro.
Es como ver pasar una nube de mariposas o un ramo de flores….te alegran un
momento los ojos….pero uno no se enamora de una nube de mariposas o de un ramo de
flores.”
Le pregunte a mi abuelo, si el cree que todos los hombres sienten así…
Y el me respondió con otra pregunta:
¿Como sienten las mujeres?
¡Oh!, nos gusta mirar a Alain Delon, pero el corazón se apura en nuestro pecho cuando
vemos que viene caminado hacia nosotras el hombre a quien amamos.
2. Es por él, que me angustio cuando tarda en llegar, que me da miedo si discute con
alguien.
La marea de su mirada me da tormenta y paz, y lo que voy recogiendo a lo largo del día
es el botín para su cesta:
El sol dormido en la orilla de una rama en la plaza…el vestido orgulloso en una
vidriera…el murmullo de rezos en la blanca capilla…un olor de junquillos de color
oro…pensamientos que se zambullen como peces en mi cerebro.
Cuando nos encontramos, a veces no le doy todo lo que junte para él…pero igualmente
esta y le pertenece, y podrá tomarlo cuando el lo desee.
¡¡ Es que me da vergüenza mostrar que siento tanto !!
Mi abuelo se sonríe y me comenta que a el le paso lo mismo.
Llegamos a la conclusión de que son los temores los que complican todo y lo entorpecen.
Fuimos educados en el temor al ridículo, al que dirán, en el ocultamiento sistemático de
nuestra sensibilidad para no parecer débiles o cursis, nos avergonzamos de tener un
grano en la nariz o que vean nuestras lagrimas emocionada, pero nadie parece tener
vergüenza de las fotos trágicas y los titulares terroríficos de las primeras planas de los
diarios.
Con mi abuelo estoy totalmente de acuerdo en algo:
Ser amado es…ser esencialmente hermoso para alguien…
¡¡ Que siempre sepas…dar…expresar…y recibir amor !!