Este documento es una carta de una hija a su madre. Expresa que durante el embarazo solo la luz de los ojos de su madre le permitía respirar y sentir su calor maternal. Soñaba con conocerla y cuando nació en febrero, la encontró tan maravillosa y dulce como la había imaginado durante nueve meses. Ahora, a los diecinueve años, sigue valorando los consejos de su madre que la ayudan a enfrentar los peligros de la vida.