Construir una PC requiere elegir los componentes adecuados como la tarjeta madre, procesador, memoria RAM, tarjeta gráfica, unidad de almacenamiento y fuente de poder. Una vez seleccionados los componentes, se ensamblan en la caja del sistema siguiendo las instrucciones del manual y se instala el sistema operativo. Al finalizar el ensamblaje y configuración, la nueva PC estará lista para usar.