El documento cuenta una historia alegórica sobre la crisis financiera mediante la metáfora de una aldea que compra burros a sobreprecio y queda endeudada. Un hombre visita la aldea ofreciendo comprar burros cada vez más caro, hasta que desaparece sin pagar. Los aldeanos que pidieron prestado para comprar burros no pueden pagar y la deuda se extiende al ayuntamiento. Para salvar la situación, el ayuntamiento reduce los sueldos de los funcionarios en lugar de perdonar la deuda.