Este documento presenta una lista de objetos típicos de una oficina y sus usos alternativos o poco convencionales desde la perspectiva de un empleado ojeroso. Entre ellos se encuentran usar el reloj y espejo para controlar la llegada del jefe, teclear sin parar para aparentar trabajo, echarle la culpa a otros para evadir responsabilidades, y usar la máquina de café y escalera de incendios para escaparse antes. El objetivo es pasar el tiempo sin que el jefe note la falta de productividad.