El Monumento a la Virgen de la Paz en el estado Trujillo de Venezuela es la escultura habitable más alta de América con 46,72 metros. Diseñado por el escultor español Manuel de la Fuente e inaugurado en 1983, ofrece cinco miradores con vistas del estado Trujillo, la Sierra Nevada de Mérida y el Lago de Maracaibo, y fue la estatua dedicada a la Virgen María más alta del mundo hasta la inauguración del Monumento Manto de María Divina Pastora en el estado Lara.