La democracia ateniense surgió en el siglo VI a.C. cuando Cleisthenes estableció un sistema político que le daba el poder al pueblo a través del voto. Los atenienses protegían su democracia con entusiasmo y Atenas se convirtió en una potencia económica e internacional bajo el liderazgo de Pericles. Sin embargo, tras la muerte de Pericles en el 429 a.C., Atenas nunca más tuvo un líder político con una visión de futuro.