Este documento presenta a Pedro Portillo, un padre creyente en Dios que trabaja como gerente de ventas en una concesionaria de automóviles. Pedro está agradecido por su hermosa familia, que incluye a su esposa y sus dos hijos Claudia Victoria y Juan David, a quienes está educando con valores y para que sean empresarios exitosos. Pedro también es voluntario en una organización sin fines de lucro que apoya a niños y adolescentes con VIH.