El documento anuncia que quemar bosques sin permiso está prohibido por la ley nacional y provincial para prevenir daños ambientales y riesgos a la salud pública. También indica que provocar incendios forestales, no denunciarlos o no ayudar a combatirlos son considerados infracciones. Además, proporciona información de contacto para reportar incendios forestales a la policía, bomberos u otras agencias gubernamentales.