Internet está compuesta por miles de computadoras interconectadas que permiten el intercambio de información. Los computadores pueden ser servidores, que almacenan y comparten información, o clientes, que acceden a esa información. Para conectarse a Internet se necesita un computador, modem, línea telefónica y proveedor de servicios. Los protocolos TCP/IP permiten la comunicación entre las máquinas a través de direcciones IP únicas.