La inyección SQL es una técnica de ataque que aprovecha vulnerabilidades en aplicaciones para ejecutar comandos SQL maliciosos, lo que puede permitir a un atacante obtener, modificar o eliminar datos en una base de datos. Las medidas para prevenir este tipo de ataques incluyen filtrar entradas de usuario, limitar privilegios de acceso y utilizar procedimientos almacenados. Es crucial establecer prácticas seguras de manejo de bases de datos para mitigar estos riesgos.