Este documento resume la historia de Carmen Marín, una mujer chilena del siglo XIX que sufría ataques que fueron interpretados de diferentes maneras por médicos y sacerdotes. Algunos creían que estaba poseída por demonios, mientras que otros doctores diagnosticaron que padecía de histeria o enfermedades nerviosas. Los síntomas, opiniones médicas y conclusiones variadas sobre su caso generaron un debate sobre la naturaleza de su condición.