Una mujer de 50 años se somete a una cirugía plástica para rejuvenecerse y le pregunta a varias personas cuántos años creen que tiene, obteniendo respuestas de entre 29 y 32 años. Finalmente, un anciano le ofrece un método infalible para averiguar su edad real consistente en tocarle los pechos, a lo que ella accede. Tras varios minutos, él le dice que tiene 50 años, revelando luego que en realidad la había visto antes en la cola de McDonald's.