El documento describe la experiencia de conducir en Gran Bretaña como extranjero, donde las señales de tráfico son diferentes y los conductores a veces impredecibles. Al conducir tranquilamente, el autor se encuentra con una señal desconocida y reduce la velocidad con cautela. Resulta ser una rotonda mágica, una intersección circular poco común en Gran Bretaña y potencialmente peligrosa para los conductores no familiarizados.