El documento narra la historia de un niño que no entendía por qué su madre lloraba a veces sin razón aparente. Al crecer, le preguntó a Dios por qué las mujeres lloran tan fácilmente. Dios le explicó que cuando creó a la mujer le dio la fortaleza para soportar grandes cargas emocionales y físicas, pero también le dio las lágrimas para que pueda descargar esas emociones cuando sea necesario, derramando amor con cada lágrima. El hombre comprendió entonces el sentir de su madre y otras mujeres