Este documento presenta una serie de los mejores destinos turísticos del mundo, incluyendo Estambul, Roma, Londres, Pekín, Praga, Marrakech, París, Hanoi y Siem Riep. Cada ciudad se destaca por su rica historia, cultura y atracciones únicas como monumentos históricos, museos, mercados y paisajes. El documento proporciona una breve descripción de los principales puntos de interés y actividades recomendadas en cada destino.
2. Estambul.
Turquia.
Las mezquitas, los bazares y los baños turcos de
Estambul bastarían para mantenerte felizmente ocupado
durante todo el viaje: un vistazo a la impresionante
arquitectura por aquí, un amable regateo para comprar
una alfombra por allá... Comienza el viaje en la alucinante
Mezquita Azul (Sultan Ahmet Camii), que puede verse
desde muchos puntos de la ciudad. Pasea por el Puente
Gálata y haz una parada en el parque Miniaturk para ver
sus pequeños artefactos. El Gran Bazar (Kapali Carsi)
tiene miles de tiendas que curiosear, mientras que el
Bazar egipcio es un fragante tesoro de especias y frutas.
3.
4. Roma.
Italia.
Roma tampoco se puede visitar en un día. La ciudad
parece la sala de exposiciones de un enorme museo al
aire libre, un collage en la vida real de piazzas, mercados
exteriores e impresionantes enclaves históricos. Echa una
moneda en la Fontana di Trevi, déjate impresionar por el
Coliseo (Colosseo) y el Panteón, y recarga las pilas con
un cappuccino para disfrutar de una tarde de compras en
Campo de'Fiori o Via Veneto. Híncale el diente a un plato
de pasta fresca, unas suculentas alcachofas fritas o un
tierno estofado de rabo de buey; será una de las mejores
comidas de tu vida.
5.
6. Londres.
Reino Unido.
Las joyas de la corona, el palacio de Buckingham, el
mercadillo de Camden... En Londres, la historia compite
con el arte, la moda, la comida y la buena cerveza
británica. Cada persona vivirá su día perfecto de forma
distinta: los amantes de la cultura deben pasarse por el
Tate Modern y la Royal Opera House; las víctimas de la
moda se quedarán embobadas con las tiendas de Oxford
Street; para los gourmets, un delicioso cream tea en
Harrods o un poco de pescado crujiente en una auténtica
freiduría ofrecen el sabor más clásico de Londres; los
aficionados a la música y la lectura delirarán en Abbey
Road y en el museo de Sherlock Holmes (en el 221B de
Baker Street, claro).
7.
8. Pekin(Beijing).
China.
Los urbanistas Georges E. Haussmann y Pierre C.
l'Enfant llegaron tarde. El arquitecto urbano de Pekín
(Beijing) se les había adelantado un par de siglos. Se
llamaba Kublai Khan. Aquí encontrarás historia a
raudales, tanto antigua (el Salón de la Suprema Armonía,
el Palacio de Verano, la Ciudad Prohibida) como más
reciente (el Mausoleo del Presidente Mao, la plaza de
Tiananmen). Para disfrutar del mejor mercado, elige el de
antigüedades Panjiayuan, en lugar del turístico Mercado
de la Seda.
9.
10. Praga.
Republica Checa.
Praga, con su encanto bohemio y rasgos propios de un
cuento de hadas, es el destino perfecto para los
veraneantes que estén cansados de playa y prefieran
zambullirse en un mar de cultura. Se podría dedicar un
día entero a explorar el Castillo de Praga (Prazsky hrad)
y, después, cargar las pilas con una copiosa cena en
alguna clásica taberna checa. Dedica un rato a pasear
por la plaza de la ciudad vieja (Staromestske namesti)
antes de ir a admirar el antiguo ayuntamiento y el reloj
astronómico (Staromestska Radnice). Los mejores bares
de Praga se encuentran en sótanos; el visitante nocturno
encontrará cobijo en alguno de los pubs rebosantes de
historia para disfrutar de la bebida tradicional.
11.
12. Marrakech.
Marruecos.
La "ciudad roja" de Marrakech es un verdadero lugar
mágico, lleno de mercados, jardines, palacios y
mezquitas. Solo en explorar los íntimos patios y merodear
por los callejones de la histórica Medina de Marrakech
puede irse un día entero. No hay mejor forma de conocer
la Medina de Marrakech que caminar por sus murallas
fortificadas, literalmente. Por ellas se puede pasear o
montar en bicicleta. Encuentra la paz interior en el Jardín
Majorelle o descubre la belleza de alguna de las
históricas mezquitas de la ciudad (teniendo en cuenta
que, a menos que seas musulmán, no podrás entrar).
13. Paris.
Francia.
Un tranquilo desayuno con pain au chocolat en la terraza
de una cafetería, relajarse después de un día paseando
por el río Sena y maravillarse con iconos como la Torre
Eiffel y el Arco del Triunfo... Una experiencia parisina
perfecta combina el esparcimiento y la animación, con
tiempo suficiente para disfrutar de una exquisita comida y
una exposición en el Musee du Louvre. Despierta tu
espíritu en la catedral de Notre Dame (Cathedrale de
Notre Dame de Paris), ve a la búsqueda de gangas en el
Marché aux Puces de Montreuil o a por golosinas en el
Marché Raspail y remátalo todo con un espectáculo
subido de tono en el Moulin Rouge.
14. Hanoi.
Vietnam.
El tiempo ha tratado bien a la encantadora capital de
Vietnam, que conserva su barrio antiguo, sus
monumentos y su arquitectura colonial, a la vez que deja
espacio a las construcciones modernas. Aunque ha
recibido varios nombres a lo largo de su historia (entre
otros Thang Long, o "dragón ascendente"), Hanói no ha
olvidado su pasado como queda patente en lugares como
el Mausoleo de Ho Chi Minh y la Prisión de Hoa Lo.
Lagos, parques y bulevares sombreados, así como más
de 600 templos y pagodas, aportan atractivo a esta
ciudad que se resulta fácil de explorar en taxi.
15. Siem Riep.
Camboya.
Cuando la luz de la aurora inunda los descuidados
templos y ruinas de Angkor Wat, un sencillo amanecer en
Siem Riep sobrecoge por su profundidad. Las ancestrales
estructuras se encuentran dentro de uno de los mayores
complejos religiosos del mundo. El complejo y la ciudad
real de Angkor Thom del siglo XII se consideran las
principales razones para visitar Siem Riep. Recibe una
clase de historia nacional en el Cambodian Cultural
Village y otra sobre las prácticas locales de regateo en el
mercado nocturno de Angkor, un bullicioso océano de
vendedores de comida, bares y puestos de auténtico
estilo jemer.