La masturbación femenina típicamente involucra la estimulación del clítoris y la vagina mediante el uso de los dedos o la mano. También se puede estimular el punto G, localizado en la pared vaginal detrás del vello púbico, introduciendo un vibrador en la vagina o usando los dedos. El agua de la ducha también puede usarse para estimular el clítoris y encontrar qué temperaturas provocan más placer.