Los 33 mineros atrapados en Chile fueron encontrados con vida el 22 de agosto gracias a los esfuerzos de sus compañeros que trabajaron día y noche creando sondas. Los familiares celebraron al recibir una carta de uno de los mineros, Mario Gómez, confirmando que todos los 33 estaban bien en el refugio. Cada familiar tiene críticas sobre la seguridad en la mina San José y planea presentar quejas formales.