Este documento es un pequeño homenaje a las mujeres de todas las edades y nacionalidades, especialmente a aquellas que siguen amando, soñando y luchando por un mundo mejor a pesar de las dificultades. También incluye una cita de la escritora Gioconda Belli donde agradece a Dios por hacerla mujer y describir algunas de las características físicas y emocionales que la definen como tal.
La bolera, la tinta y la luz de francesco tomaselliArquiletal
El "color interno” de una persona, un color pobre, opacado por las dificultades de la vida, es mínimo, si comparado con los múltiples colores de la naturaleza. Pero, esa apagada y monocromática "tinta" personal resulta ser, al fin, ÚNICA, reconocible y verdaderamente auténtica. Por esta razón adquiere el máximo valor, juntándose a los otros colores de los seres humanos y de la naturaleza alrededor. El caso de la “bolera” parece perfectamente encajar en este tema. Una existencia de trabajo y sacrificio llevan una persona a eliminar las posibilidades de "absorber" los colores de la vida: le falta el amarillo del trigo en verano, el azul intenso que enciende los ojos de una persona que emprende un viaje en mundos desconocidos. Le quedan... el negro y el café. Pero su mezcla hace de ella la mujer poderosa, resistente y única. Así como es.
La "Sciusciá" de Vallarta (recordando el nombre italiano de la célebre película neorrealista de Victorio De Sica) y no una "nómada(ma)" que, para vivir, limpia botas. Su cuidado del cliente, su actitud, su "tinta" transforman su trabajo en una obra de artesanía sin igual. Ella absorbe todo lo opaco, los signos de vejez y desgaste de la herramienta básica de los humanos, los pies, y les regresa la vida con su color y sus magistrales toques. Por fin, su color "café-negro" no es una tinta cualquiera, es un color especial ,capaz de renovar y hacer brillar a los demás en sólo 10 minutos. -¿No será magia?-
La bolera, la tinta y la luz de francesco tomaselliArquiletal
El "color interno” de una persona, un color pobre, opacado por las dificultades de la vida, es mínimo, si comparado con los múltiples colores de la naturaleza. Pero, esa apagada y monocromática "tinta" personal resulta ser, al fin, ÚNICA, reconocible y verdaderamente auténtica. Por esta razón adquiere el máximo valor, juntándose a los otros colores de los seres humanos y de la naturaleza alrededor. El caso de la “bolera” parece perfectamente encajar en este tema. Una existencia de trabajo y sacrificio llevan una persona a eliminar las posibilidades de "absorber" los colores de la vida: le falta el amarillo del trigo en verano, el azul intenso que enciende los ojos de una persona que emprende un viaje en mundos desconocidos. Le quedan... el negro y el café. Pero su mezcla hace de ella la mujer poderosa, resistente y única. Así como es.
La "Sciusciá" de Vallarta (recordando el nombre italiano de la célebre película neorrealista de Victorio De Sica) y no una "nómada(ma)" que, para vivir, limpia botas. Su cuidado del cliente, su actitud, su "tinta" transforman su trabajo en una obra de artesanía sin igual. Ella absorbe todo lo opaco, los signos de vejez y desgaste de la herramienta básica de los humanos, los pies, y les regresa la vida con su color y sus magistrales toques. Por fin, su color "café-negro" no es una tinta cualquiera, es un color especial ,capaz de renovar y hacer brillar a los demás en sólo 10 minutos. -¿No será magia?-
1. Ser mujer Un pequeño homenaje para las mujeres. De todas las edades y nacionalidades. Sobre todo para las que contra viento y marea siguen amando, soñando y luchando por un mundo mejor.
2. El tema musical justamente se llama “ Glorianna - Himno a la mujer" , de Vangelis.
31. Y Dios me hizo mujer, de pelo largo, ojos, nariz y boca de mujer. Con curvas y pliegues y suaves hondonadas, y me cavó por dentro, me hizo un taller de seres humanos. Tejió delicadamente mis nervios y balanceó con cuidado el número de mis hormonas. Compuso mi sangre y me inyectó con ella para que irrigara todo mi cuerpo; nacieron así las ideas, los sueños, el instinto. Todo lo creó suavemente a martillazos de soplidos y taladrazos de amor, las mil y una cosas que me hacen mujer todos los días, por las que me levanto orgullosa todas las mañanas y bendigo mi sexo. Gioconda Belli ____________________