El programa Nike Reuse-A-Shoe fue creado en los años 90 para recoger zapatillas deportivas usadas y desechos de fabricación para reciclarlos y transformarlos en superficies deportivas y parques infantiles. Desde su creación, el programa ha reciclado más de 28 millones de pares de zapatillas y miles de toneladas de desechos de fabricación.