Este documento discute cómo la guerra económica contra Venezuela ha hecho que la gente se sienta irritable e imbécil, lo que lleva a culpar a otros por los problemas. También señala cómo los medios buscan crear pánico para defender los intereses de grandes corporaciones. Finalmente, advierte que este ambiente lleva al odio y la confrontación entre venezolanos, lo que podría conducir a una guerra civil, instigada por fuerzas externas.