El documento habla sobre la pérdida de interés espiritual. Explica que cuando los creyentes operan bajo el concepto de que la vida cristiana debe ser fácil y no comprenden la soberanía de Dios, pueden perder la confianza y el interés. También menciona que Jacob se sentía derrotado y Dios lo invitó a ir a la ciudad de Betel para estar más cerca de Él, no entre el pueblo cananeo. Antes de encontrarse con Dios nuevamente en Betel, Jacob se preparó con limpieza.