Los tigres blancos son tigres comunes con una condición genética rara que casi elimina el pigmento naranja de su piel, dejándola blanca cremosa con rayas negras. Esto ocurre cuando un tigre hereda dos copias del gen recesivo para la coloración pálida, resultando en una nariz rosa, ojos azules hielo y piel blanca cremosa con rayas negras u oscuras.