El documento habla sobre Assassin's Creed Rogue, un videojuego de la serie Assassin's Creed en el que el jugador toma el papel de un antiguo asesino que se ha cambiado al bando de los templarios. También menciona que los gráficos de los videojuegos, especialmente los de deportes, se vuelven más realistas cada vez y a veces es difícil distinguir al jugador virtual de su modelo real. Por último, analiza la similitud entre los efectos que producen los videojuegos y la literatura en los lectores y jugadores.