Este poema rinde homenaje a las madres y describe sus cualidades. En primer lugar, destaca que las madres tienen algo de divino en su infinito amor y cuidado incansable. Además, señala que a pesar de su juventud o vejez, sabiduría o ignorancia, riqueza o pobreza, siempre anteponen la felicidad de sus hijos a la propia. Finalmente, subraya lo poco que valoramos a nuestras madres mientras viven y lo mucho que daríamos por volver a verlas o abrazarlas después de su muerte