La computadora se ha convertido en una herramienta indispensable en la vida cotidiana. Aprender habilidades básicas como el uso de software de productividad como procesadores de texto y hojas de cálculo, navegación web segura y comunicación a través de correo electrónico y redes sociales es fundamental en la era digital. La práctica constante mejora la destreza y confianza con la tecnología.