La transición a la televisión digital permitirá que las estaciones de televisión brinden una mejor calidad de imagen y sonido, así como más canales en el mismo espacio de frecuencia. Los televidentes necesitarán obtener un decodificador digital o un televisor digital integrado para continuar viendo la televisión después de que se apaguen las señales analógicas. La transición a la televisión digital se completará en 2009.