La Unión Europea ha acordado un embargo petrolero contra Rusia en respuesta a la invasión de Ucrania. El embargo forma parte de un sexto paquete de sanciones y privará a Rusia de miles de millones de euros en ingresos. Sin embargo, Hungría, Eslovaquia y la República Checa aún dependen en gran medida del petróleo ruso, por lo que se les otorgará una exención temporal al embargo.