Cuatro pequeños personajes, dos ratones llamados Fisgón y Escurridizo y dos liliputienses llamados Hem y Haw, recorrían un laberinto cada día en busca de queso. Los ratones utilizaban su sentido del olfato mientras que los liliputienses usaban su inteligencia. Después de un tiempo, encontraron un depósito de queso. Mientras los ratones se dieron cuenta que el queso se estaba acabando y decidieron buscar nuevo queso, los liliputienses no notaron los cambios y regresaron a casa hambrient