El devocional habla sobre la falta de amor hacia Dios y entre los creyentes, citando Apocalipsis 2:4-5. Exhorta a los creyentes a pedirle al Espíritu Santo que revele áreas donde han perdido la pasión y el primer amor por Dios, y a comprometerse a enfocarse completamente en Jesucristo y su reino. La oración final pide a Dios perdón por haberlo olvidado, y ayuda para reencontrar su amor y amar a los hermanos.