Este documento ofrece consejos para resolver problemas de belleza comunes que pueden surgir cuando una mujer está lejos de casa, incluyendo soluciones para cabello esponjado usando humectante para manos, maquillaje corrido usando pañuelos y agua para limpiar manchas, y manchas de desodorante frotando la mancha con la misma prenda para disolverla. También proporciona remedios para medias rasgadas usando barniz de uñas transparente, tacones rotos usando pegamento fuerte, y manchas de comida enju

1. S.O.S de Belleza
Por: Catalina Walsh
A todas nos ha tocado vivir emergencias de belleza cuando estamos lejos de casa.
Aquí te tenemos consejos prácticos para que puedas resolver algunos de los
problemas más comunes:
Cabello Esponjado
Te pasaste horas con la plancha hasta lograr ese lacio perfecto, pero cuando sales de
casa resulta que está lloviendo o quizás el ambiente está húmedo. ¡Puff! El cabello se
te esponja por completo. Desearías no haberte alaciado y dejarte tus rizos naturales,
pero ya es muy tarde. ¿Qué hacer?
Una solución rápida si no tienes a la mano gel o crema anti-frizz, es usar humectante
para las manos. Concéntrate en las puntas y no uses demasiado para evitar que tu
cabello luzca graso. Si tu cabello es largo te recomiendo que tras aplicar el
humectante te lo amarres en una cola de caballo para controlarlo mejor.
Maquillaje Corrido
La lluvia, lágrimas o sudor pueden causar que se nos corra el rimel si éste no es
resistente al agua. Lo mejor que puedes hacer, es colocar un pañuelo debajo de tus
ojos para evitar que el maquillaje se te corra por todo el rostro. Utiliza agua… o
incluso saliva… para limpiar las pequeñas manchas negras que no hayas alcanzado
evitar. Aplica entonces un poco de polvo compacto debajo de tus pestañas inferiores
y ya estás, como si nada hubiera pasado.
Mancha de desodorante
Típico que usas ropa oscura y ya que estás fuera de casa te miras al espejo y ahí
están, en tus costados, las manchas blancas de tu desodorante. ¿Cómo
desaparecerlas? Es súper sencillo. Frota la mancha con otra parte de tu misma blusa
o vestido. La idea es que la frotes con el mismo material. La mancha se disuelve por
completo. Yo misma no lo podía creer pero está verificado, es así de sencillo.
Media Rasgada
A todas nos ha pasado y el remedio es viejo pero muy efectivo. Lleva barniz de uñas
transparente en tu bolso siempre que uses medias. Si se te rasga, inmediatamente
cubre toda la rasgadura con barniz para evitar que se corra más. De preferencia
utiliza uno de secado rápido. Si estás en el trabajo y no tienes barniz, puedes usar
corrector blanco o Wipe-out. No es tan sutil pero al menos evitará que la media se te
siga corriendo.
Tacones Rotos

2. La solución a esto no es tan sencilla como aparece en la televisión. Si se te rompe un
tacón no puedes romper el otro y listo, quedar con zapatos planos. La forma del
zapato no es para zapato plano y no te servirá. En realidad el único remedio es usar
un fuerte pegamento. Si el tacón estaba unido a la suela con unos clavitos, pon el
pegamento sobre estos clavitos y colócalos en su lugar sujetando firmemente hasta
que seque. Si el tacón estaba pegado a la suela con pegamento, tendrás que limpiar
el pegamento viejo antes de aplicar el nuevo.
Manchas de comida
Estás en una fiesta o en un restaurante, con un vestido súper elegante, y te cae una
gota de salsa de tomate encima. ¿Cómo la limpias? Ve al baño inmediatamente y
quítate la prenda si es posible. Enjuaga con agua fría de adentro hacia fuera, para
que la mancha salga en vez de impregnarse más. Si haces esto a tiempo, quizás sea
todo lo que necesites hacer para sacar la mancha, pero si no sale por completo,
aplica jabón por fuera y frota con la misma tela. Ahora tendrás una mancha de agua,
pero esto es mucho mejor que una mancha de comida que pueda incluso echar a
perder tu prenda. Si puedes cubrir la mancha con un saco hasta que seque, adelante,
si no, no te preocupes tanto, pronto secará.
Lo más importante es recordar que todas hemos pasado por al menos un par de
estas situaciones. Es de lo más común y no hay por qué avergonzarse. Reacciona
tranquilamente y toma control del problema.