Un virus informático se propaga de un equipo a otro al adjuntarse a archivos o programas. Permanece inactivo hasta que se ejecuta el archivo infectado, momento en el que puede infectar otros equipos en la misma red e incluso robar datos, enviar spam o tomar el control del equipo. Los virus se propagan comúnmente a través de archivos adjuntos en correos electrónicos o mensajes, descargas desde internet o enlaces en redes sociales. Para protegerse de los virus existen diferentes tipos de antivirus.