La propiedad, planta y equipo incluye todos los activos tangibles adquiridos o construidos por una empresa para su uso a largo plazo en la producción de bienes y servicios. Estos activos se dividen en tres categorías: no depreciables como terrenos y construcciones en progreso, depreciables como equipos y edificios cuyo valor disminuye con el uso, y agotables como recursos naturales cuyo valor disminuye con la extracción. La depreciación es el gasto asociado con la pérdida de valor de los activos