La tecnología ofrece muchas oportunidades para mejorar nuestras vidas y la sociedad. Sin embargo, también plantea desafíos importantes relacionados con la privacidad, la seguridad y los efectos en nuestra salud mental y bienestar. Debemos asegurarnos de que los avances tecnológicos se desarrollen y utilicen de manera ética y responsable para beneficiar a la humanidad.