Niña Bonita, es un cuento de una niña muy hermosa, con ojos expresivos, cabello negro rizado y de un conejito blanco, de orejas rosadas, ojos rojos y hocico tembloroso, que admira la belleza de la niña.
El cuento ¡No, David! escrito e ilustrado por David Shannon relata la historia de como la mamá de David le dice ¡No! a todas su travesuras. David realiza un sin número de travesuras como; brincar en la cama, jugar pelota dentro de la casa, salir desnudo por la calle, entre muchas otras. Este cuento es muy divertido para los niños ya que recuerdan sus travesuras y que a pesar de todo su mamá siempre los quiere.
El zorro se ha despertado con un hambre del tamaño del mundo, y por obvias razones salió en busca de saciar esa hambre. Sale y encuentra en total 10 huevos, unos los halló en un tronco, otros en el pantano, y algunos por donde se le ocurrió pasar. Cuando contó hasta diez regresó a su casa saboreándose el banquete que creía que se comería. Su soledad tenía un punto a su favor el de no compartir con nadie nada. Mientras preparaba los ingredientes se topó con una sorpresa que cambiaría su mañana para siempre.
Niña Bonita, es un cuento de una niña muy hermosa, con ojos expresivos, cabello negro rizado y de un conejito blanco, de orejas rosadas, ojos rojos y hocico tembloroso, que admira la belleza de la niña.
El cuento ¡No, David! escrito e ilustrado por David Shannon relata la historia de como la mamá de David le dice ¡No! a todas su travesuras. David realiza un sin número de travesuras como; brincar en la cama, jugar pelota dentro de la casa, salir desnudo por la calle, entre muchas otras. Este cuento es muy divertido para los niños ya que recuerdan sus travesuras y que a pesar de todo su mamá siempre los quiere.
El zorro se ha despertado con un hambre del tamaño del mundo, y por obvias razones salió en busca de saciar esa hambre. Sale y encuentra en total 10 huevos, unos los halló en un tronco, otros en el pantano, y algunos por donde se le ocurrió pasar. Cuando contó hasta diez regresó a su casa saboreándose el banquete que creía que se comería. Su soledad tenía un punto a su favor el de no compartir con nadie nada. Mientras preparaba los ingredientes se topó con una sorpresa que cambiaría su mañana para siempre.
Cada noche un pequeño mira las estrellas desde su habitación y sueña con tener una para él. Un día, decide buscar la manera de atraparla ¿lo conseguirá?
Ramiro es un ratoncito muy tímido y ella la menor de su familia. Él la observa todo lo que pueda sin que ella lo note...Ella es de una familia de humanos!