La Web 3.0 facilita la accesibilidad de la información independientemente del dispositivo, evolucionando hacia una red de datos inteligente que extrae sentido de cómo las personas interactúan a través de servicios colaborativos. Compañías como IBM y Google están implementando tecnologías como la inteligencia artificial y semántica para hacer predicciones basadas en grandes cantidades de datos. Algunos también ven la Web 3.0 dirigiéndose hacia un formato 3D más inmersivo.