Jesús envió a sus discípulos como ovejas entre lobos para que llevaran a cabo su ministerio fuera del aula, donde realmente había necesidad. Aunque estarían rodeados de enemigos, Jesús les dio instrucciones precisas y poder sobre los demonios y enfermedades. La Biblia presenta varios ejemplos como José, Daniel, Ester y Pablo que a pesar de encontrarse entre lobos, prevalecieron y llevaron a cabo la voluntad de Dios. Al igual que ellos, los cristianos deben estar preparados para operar