1. EL CIELO Y EL INFIERNO
Un hombre le pregunta a Dios sobre el cielo y el infierno. El señor
le dijo “ven te mostraré el infierno “entraron a una inmensa
habitación en donde un grupo de personas se encontraban al
redor de una enorme olla de guisado.
Todos estaban desesperados y muertos del hambre. Cada
persona sostenía una cuchara que tocaba la olla, pero cada
cuchara tenía un mango más largo que su propio brazo, de tal
manera que no podía utilizarse para llevar el guisado a su boca.
El sufrimiento era terrible.
“ven ahora te mostrare el cielo” dijo el señor después de un
tiempo.
Entraron en una habitación idéntica a la primera (la olla de guisado, el grupo de personas, las
mismas cucharas con mangos largos), sin embargo allí todos estaban felices y bien alimentados
“no comprendo”, - dijo el hombre – “¿por qué están felices aquí, sin en la otra habitación se sienten
miserables y todo es igual? “
El señor se sonrió ¡Ah, es sencillo! Respondió
Aquí aprendieron a alimentarse unos a otros mudamente.
Es decir que mientras en el infierno cada uno quiere comer con su cuchara y no es capaz de
compartir con los demás, en el cielo cada uno piensa primero en el hermano y con su propia
cuchara lo alimenta.