1. I. ASPECTOS INTRINSECOS DE LA OBRA
1. ARGUMENTO
El narrador de la historia empieza compartiendo un recuerdo que le
mantiene inquieto: cierta tarde que paseaba por el centro de la ciudad
de Lima observa entrar en una tienda de perfumes a una mujer rubia
vestida de un ceñido traje de terciopelo negro, a la que cree conocer,
sin recordar de dónde. No logra acercársela, pues la mujer se retira
apresuradamente, pero averigua su dirección y le envía un regalo y su
tarjeta.
Enseguida, el narrador se explaya en evocaciones coloniales al visitar la
quinta del Virrey Manuel Amat y Juniet y de La Perricholi, al otro lado de
la ciudad. Después, hace una especie de tour artístico por museos e
iglesias del centro de Lima: hace en un elogio de las pinturas de Ignacio
Merino, de los huacos y tejidos incaicos, de la escultura de la Muerte
de Baltazar Gavilán y describe la tumba del conquistador Francisco
Pizarro en la Catedral de Lima.
Más adelante el narrador anuncia que debe tomar el tren rumbo a la
ciudad “B”, la tétrica “ciudad de los tísicos” para visitar la tumba de su
amigo Abel Rosell, fallecido poco tiempo antes, víctima del terrible mal.
Antes de emprender el viaje, el narrador comparte las numerosas cartas
que desde la ciudad “B” le había enviado Rosell. En ellas, éste le cuenta
historias fantásticas cuyos protagonistas son personajes extraños, todos
enfermos de tuberculosis. En especial, el misterio se cierne en torno a
una mujer llamada Magdalena de Liniers, quien ingresa cada quince
días en el sanatorio en busca de su esposo tísico. Su deseo de viajar
nace, pues, de su necesidad de indagar en estos personajes
fascinantes.
Pero antes de iniciar el viaje el protagonista debe asistir a una cita con
la misteriosa mujer de la tienda de perfumes, quien tras recibir el
obsequio, lo ha invitado a su casa. El narrador descubre entonces su
verdadera identidad: se trataba de la misma Magdalena de Liniers,
quien le aconseja no realizar el viaje a la ciudad “B” "para no romper el
encanto de lo misterioso".
2. TITULO
El titulo hace referencia a la fermedad llamada tisis que transcurrió con
mayor rigor a finales del siglo XIX y a principios del siglo XX en todo el
mundo, donde las sociedades estaban temerosos de ellos y las
personas buscaban lugares donde se puedan curar de la enfermedad.
2. 3. GENERO Y ESPECIE LITERARIA
Género: Narrativo
Especie: Novela
4. TEMAS
La obra trata de una persona que va ha viajar para visitar la
tumba de un amigo pero antes de hacerlo conoce a una mujer
misteriosa, visita museos y finalmente lee las cartas de su
amigo que son el fondo de la obra y tratan de la vida, en espera
de la muerte, delas personas que sufren de tisis y por eso van
a vivir a esta ciudad de la sierra..
5. PERSONAJES
5.1. PRINCIPALES
El Narrador, es quien relata la historia, que se inicia cuando
conoce a una misteriosa mujer, con quien logra hacer una
cita. Lee también las cartas que le ha enviado su amigo, ya
difunto, Abel Rosell, desde la “ciudad de los tísicos”.
Entusiasmado por la descripción de aquel mundo y sus
habitantes, decide visitarlo, pero antes se encuentra con la
mujer misteriosa, de la que descubrirá su identidad. El
narrador es un ser sensible, fino, delicado y muy cultivado.
Conocedor de arte, literatura e historia, evoca con nostalgia
la Lima de los Virreyes.
Abel Rosell, es el amigo del narrador que al momento de
principiar la historia ya había fallecido de tuberculosis. Antes
había vivido en París; de allí pasó a España y tras iniciarse su
enfermedad se trasladó a Sudamérica, donde por consejo de
los doctores se instaló en la ciudad “B”, asilo de tísicos
situado en el Perú, desde donde le escribe a su amigo, el
narrador, numerosas cartas, contándole sobre los extraños
seres que habitaban dicho albergue, entre ellos, una
enigmática mujer que visitaba cada 15 días a su marido tísico.
3. A partir de esas cartas, el narrador imagina un mundo de
misterio, al que ansía conocer.
La mujer misteriosa (Magdalena de Liniers), la que impacta
tanto al narrador, cuando la ve por primera vez en la
perfumería, haciendo el pedido de un frasco del perfume de
Flor de Lys, que normalmente demoraría en ser entregado.
Por coincidencia, el narrador tenía en su maletín dos frascos
de ese perfume y entonces ve la posibilidad de una aventura.
Averigua la dirección de la dama y le envía el obsequio,
adjuntándole su tarjeta. Acto seguido recibe una carta de la
mujer donde le agradece el regalo y le invita a visitarla en su
villa a la hora del té. El narrador, que justo esa tarde tenía
planeado ir a la “ciudad B”, asiste a la cita y se entera
entonces de la identidad de la misteriosa mujer: se llamaba
Magdalena de Liniers y era nada menos que la enigmática
visitante de la “ciudad” de los tísicos. Es una mujer
esplendorosa, que cautiva a todo aquel que la observa.
Personajes de la correspondencia de Rosell
Mundo extraño y fantasmal es aquel albergue de tísicos
descrito en la correspondencia de Abel Rosell y nombrado
como la “ciudad B”, habitado por enfermos procedentes del
extranjero, de toda condición social y cultural, y que actúan
como poseídos, esperando la muerte inevitable, aunque no
por ello dejan de vivir cada momento intensamente. Muchas
incógnitas relacionadas con dicha “ciudad” y sus moradores
quedan sin responder, siendo evidente la intención del autor
de crear un ambiente de misterio. Mencionaremos
sumariamente a los habitantes de dicha “ciudad de los tísicos”
(exceptuando a Abel Rosell, que ya ha sido mencionado):
Alphonsin, “un tipo originalísimo y artístico”, que se hace
amigo de Rosell. Aficionado de la pintura y la poesía, había
vivido en Parísy Londres; en esta última ciudad había
contraído la enfermedad. Sensible e imaginativo, interpreta a
su manera los signos que el mundo le presenta, formulando
muchas veces teorías extrañas acerca de estos.
Armando y Margarita, la pareja de tísicos, que vivían en una
esplendorosa casa a la que llaman la “villa rosada”. Se
llamaban en realidad Aníbal Besnardi y Rosa Áurea; sus
apelativos eran en alusión a Armando Duval y Margarita
Gauthier (se pronuncia “gotié”), personajes de la novela “La
dama de las camelias” de Alejandro Dumas hijo, pues al igual
que ellos se profesaban un amor ardiente a pesar de la
adversidad. Margarita era la primera que había contraído el
mal, pero Armando no la abandonó y la siguió hasta el asilo,
donde a la postre se contagió. Se casan en el albergue, en
4. una ceremonia a la que asiste Rosell, y llegan a tener una
niña, a quien bautizan como Elizabeth.
Eva María, mujer apasionada, quien amanece muerta en la
casa de Margarita, a la mañana siguiente de la boda, tendida
en un diván, con una expresión serena y los labios
entreabiertos. En la víspera la había besado un ebrio Rosell,
en plena oscuridad y sin reconocerla, quien se quedó dormido
a sus pies.
Felipe Liniers, un hombre rico y licencioso, que vivía retirado
en su villa y tenía como amante a otra tísica, llamada Egadí.
Sin embargo tenía una esposa, sana, que vivía en la capital y
le visitaba puntualmente cada 15 días, la ya mencionada
Magdalena de Liniers.
Egadí, la ardorosa tísica, amante de Felipe Liniers, a quien no
quería soltar, aun cuando se presentaba Magdalena, la
“auténtica” esposa.
Claudio, amigo de Rosell, obsesionado por la esposa de
Liniers. Obliga a Rosell a acompañarle a la estación del tren,
para ver a Magdalena, cuando ésta llegaba procedente de la
capital a visitar a su marido.
Rosalinda la triste, la tísica mística, que solía orar en la gruta
de una Virgen, suplicando por un bienestar que jamás
llegaría; “triste, silenciosa, maligna, gran coqueta en silencio”,
de ella se enamora Rosell.
El Cónsul Cortéz, de México, calvo, alto y seco. Le
acompañaban dos de sus hijos: Mary, una muchacha
ardiente, y Eduardo, un joven gordo, acuarelista. Todos
tísicos.
Sor Luisa de la Purificación, una monja de convento, que
llevaba siempre una pesada cruz de plata. Una criatura buena
y apacible. La apodan cariñosamente “palomita”.
Gastón el buenmozo, quien es visitado frecuentemente en su
villa por muchas tísicas “enamoradas e impacientes” entre
ellas la hija del Cónsul.
Eduardo hijo del consul mexicano quien muere dias antes del
bautismo de elizabeth
Elizabeth hija de armando y margarita la cual va a ser bautizada
pero la mayoria de los tisicos mueren antes
Mary mujer muy bonita que esta detras de Gastón el buenmozo
5. 6. MARCOS REFERENCIALES
6.1. GEOGRAFICO
Ciudad de los tísicos”, albergue de tuberculosos, cuya localización
exacta no se alude en la novela, pero según lo aseveró el mismo
autor se ubicaría en Chosica,1 en ese tiempo un aristocrático
balneario semiandino, a cuarenta kilómetros al este de Lima. En
aquella época se creía que la tuberculosis pulmonar se curaba en
los climas altos y secos, por consiguiente, en Chosica (a mil
metros de altitud) convergían los tísicos de Lima que no
alcanzaban a llegar a Jauja (sierra central del Perú), la ciudad
ideal de los tuberculosos.
6.2. HISTORICO
7. PRECIACION PERSONAL
Donde viven muchas personas atacadas por ese mal incurable.
Aunque todos saben que están sentenciados a morir pronto,
tratan de vivir los últimos días de modo intenso y febril. La
prosa poética y relampagueante atrapa al lector y le hace ver
que la vida, por más dolorosa y desgraciada que sea, tiene el
encanto de que es posible amar aún en la agonía.