El documento habla sobre vivir para la causa de Dios y la gente. Vivir para la causa de Dios mantiene vivos los ideales y permite que más personas vivan para los mismos ideales. La gente está arrastrada por el mundo pero busca al Señor. Se debe abrir el corazón y el hogar para servir al Señor ya que todos necesitamos unos de otros. El documento sugiere discipular a otros y liderar un grupo cristiano en casa.