Una oración poderosa para rezar pedir proteccion y alabar a la santisima trinidad. No es invención del ingenio humano el santísimo Trisagio, sino obra del mismo Dios, que lo inspiró al profeta Isaías cuando oyó como lo cantaban los Serafines para enaltecer la gloria del Creador.
1. TRISAGIO BIBLICO A LA SANTISIMA TRINIDAD
ACTO DE ADORACIÓN:
Trinidad Santísima, en esencia Una, Pura, Indivisible:
Único objeto de nuestro amor, adoración y culto:
Señor Padre Santo, Dios Todopoderoso y eterno, que con tu Único Hijo y el Espíritu Santo,
eres un solo Dios; no una sola persona sino tres personas en una sola naturaleza.
Lo que creemos de tu gloria, porque Tú lo revelaste, lo afirmamos también de tu Hijo,
y también del Espíritu Santo, sin diferencia ni distinción.
De modo que al proclamar nuestra fe en la verdadera y eterna divinidad,
adoramos tres personas distintas de única naturaleza e iguales en su dignidad.
TE ADORAMOS OH PADRE y te proclamamos, reconociéndote por
nuestro Creador, benefactor y origen benéfico de nuestro ser: de quien todo
procede en el cielo y en la tierra y a quien sea la gloria por los siglos de los siglos. Amén.
TE ADORAMOS A TI, HIJO UNICO DE DIOS:
en quien reside la plenitud de la divinidad y por cuya sangre
obtuvimos el perdón de los pecados: imagen de Dios invisible;
Primogénito de toda la creación, por quien fueron creadas todas las cosas
en los cielos y en la tierra. A Ti que eres primero en todo,
y por quien ha querido el Padre reconciliar con El todas las criaturas:
alabanza, honor, gloria y potencia, por los siglos de los siglos. Amén.
TE ADORAMOS A TI, ESPIRITU SANTO:
Consolador que procedes del Padre y Del Hijo,
que nos haces comprender las verdades de La Fe
y nos recuerdas lo que Cristo ha enseñado.
Tú eres digno de recibir el honor y la gloria por los siglos de los siglos. Amén.
En el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo
2. Señor: tu Palabra nos ha dicho:
"19. El sacrificio a Dios es un espíritu contrito; un corazón contrito y humillado, oh
Dios, no lo desprecias." (Sal 51, 19)
Por eso te pedimos perdón por nuestras muchas faltas, con las palabras del Salmista:
"3. Ten compasión de mí, oh Dios, por tu misericordia, por tu inmensa ternura borra
mi iniquidad. 4. Lávame más y más de mi delito y purifícame de mi pecado."
"6. Contra ti, contra ti solo pequé y he hecho lo que tú no puedes ver. Por eso tu
sentencia es justa y eres recto en el juicio."
"11. Aparta tu rostro de mis faltas, cancela mis pecados. 12. Oh Dios, crea en mí un
corazón puro, implanta en mis entrañas un espíritu nuevo; 13. no me rechaces lejos
de tu rostro, no retires de mí tu santo espíritu;" (Sal 51, 3:4 – 6 - 11:13)
ACTO DE CONTRICIÓN
"6. Acuérdate, Señor, de tu misericordia y tu bondad, que son eternas; 7. olvídate de los
pecados de mi juventud y de mis faltas; acuérdate de mí, Señor, con misericordia y con
bondad." (Sal 25, 6:7)
"9. Ayúdanos, oh Dios, salvador nuestro, por la gloria de tu nombre; líbranos, perdona
nuestros pecados, por el honor de tu nombre." (Sal 70, 9)
"11. Cuanto los cielos se alzan sobre la tierra, así es de grande su amor para los
fieles; 12. cuanto dista el oriente del occidente, así aleja de nosotros nuestras culpas."
(Sal 103, 11:12)
3. A ti gloriosa e inefable Trinidad, te pido humildemente:
firmeza en la fe, cumplimiento exacto de nuestros
deberes, seguridad en la esperanza, inmenso amor de
caridad, hacia nuestro Dios y a nuestro prójimo, perdón
de todos los pecados, paz y tranquilidad para la familia,
la Iglesia y para las naciones, la conversión de los
pecadores, el descanso para las almas de los difuntos,
vernos libres de los peligros espirituales y materiales
que nos rodean, aceptar siempre la Divina Voluntad,
conseguir las gracias que más estamos necesitando, y
la perseverancia en el bien hasta la muerte.
Todo esto por los méritos de Nuestro Señor Jesucristo,
quien con él Padre y el Espíritu Santo vive y reina por
los siglos de los siglos.
Amén
ACTO DE PETICIÓN
4. Ya el sol ardiente se aparta
Luz perenne en la unidad
Recibe nuestras plegarias
OH Trinidad inmortal.
En la aurora te alabamos,
En la tarde y entre el día,
y pedimos que en los cielos
Nuestras voces se repitan.
Al Padre, y también al hijo
y a ti Espíritu Divino
Alabanzas sean rendidas
Por los siglos de los siglos.
Amén.
HIMNO
5. Santo y Santísimo Padre Eterno, centro de toda santidad, infinitamente santo en
Ti mismo, Santo en todas tus obras, de las cuales ni una hay que no sea
perfecta. Te alabamos y bendecimos tu santo nombre y no queremos olvidar tus
beneficios.
ORACION AL PADRE
Convéncenos de que bajo la mirada de un Dios tan santo y tan justo es
imposible que viva feliz quien trata de seguir en paz con sus pecados.
Oh Padre; que vivamos en unidad, como Tú, con el Hijo y el Espíritu Santo.
Amén.
" 8. El Señor es compasivo y misericordioso, el Señor es paciente y todo amor;
9. no está siempre acusando ni guarda rencor eternamente; 10. no nos trata
como merecen nuestras culpas ni nos paga según nuestros delitos. 11. Cuanto
los cielos se alzan sobre la tierra, así es de grande su amor para los fieles; 12.
cuanto dista el oriente del occidente, así aleja de nosotros nuestras culpas. 13.
Como se apiada un padre de sus hijos, así se apiada él de sus amigos; 14. él
sabe de qué pasta estamos hechos, se acuerda de que no somos más que
polvo. 15. Los días del hombre son como la hierba, como la flor del campo así
florece; 16. la azota el viento y deja de existir, ni se sabe siquiera dónde estaba.
17. Pero el amor del Señor a sus fieles es eterno, y su justicia para todas sus
generaciones" (Sal 103, 8:17)
6. Santo, Santo, Santo, es el Señor Dios rey del Universo. Llenos están los cielos y la
tierra de la majestad de tu Gloria.
Santo, Santo, Santo, es el Señor Dios rey del Universo. Llenos están los cielos y la
tierra de la majestad de tu Gloria.
Santo, Santo, Santo, es el Señor Dios rey del Universo. Llenos están los cielos y la
tierra de la majestad de tu Gloria.
Padre nuestro que estás en
el cielo, santificado sea tu
Nombre; venga a nosotros
tu reino; hágase tu voluntad
en la tierra como en el cielo.
Danos hoy nuestro pan de
cada día; perdona nuestras
ofensas, como también
nosotros perdonamos a los
que nos ofenden; No nos
dejes caer en tentación, y
líbranos del mal.
Amén.
Dios te salve María,
llena eres de gracia
El Señor es contigo,
bendita tu eres
entre todas las mujeres,
y bendito es el fruto
de tu vientre, Jesús.
Santa María, Madre de Dios,
ruega por nosotros
pecadores, ahora y en la
hora de nuestra muerte,
Amén.
Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo. Como era en el principio,
ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén.
7. ORACION AL HIJO
"1. En el principio existía aquel que es la Palabra, y aquel que es la Palabra
estaba con Dios y era Dios. 2. Él estaba en el principio con Dios. 3. Todo fue
hecho por él y sin él nada se hizo. 4. Cuanto ha sido hecho en él es vida, y la
vida es la luz de los hombres;
"9. Existía la luz verdadera, que con su venida a este mundo ilumina a todo
hombre."
12"A todos los que lo reciben, a los que creen en su nombre, les da el ser
hijos de Dios;"
14. "Y aquel que es la Palabra se hizo carne, y habitó entre nosotros, y
nosotros vimos su gloria, gloria cual de unigénito venido del Padre, lleno de
gracia y de verdad."
16"De su plenitud, en efecto, todos nosotros hemos recibido, y gracia sobre
gracia." (Juan1, 1:4 -9-12-14-16)
Santo y perfecto modelo de toda santidad, de quien el Padre nos ha destinado a
ser imitadores lo más perfectamente que podamos. Tú, en quien reside toda la
plenitud de la divinidad, haz que aprendiendo de Ti que eres manso y humilde
de corazón y que no viniste a ser servido y a dar la vida por todos, nosotros
llevemos una vida santa en la tierra, y suspiremos por aquel día en el cual te
amaremos para siempre en el cielo.
Amén.
8. Santo, Santo, Santo, es el Señor Dios rey del Universo. Llenos están los cielos y la
tierra de la majestad de tu Gloria.
Santo, Santo, Santo, es el Señor Dios rey del Universo. Llenos están los cielos y la
tierra de la majestad de tu Gloria.
Santo, Santo, Santo, es el Señor Dios rey del Universo. Llenos están los cielos y la
tierra de la majestad de tu Gloria.
Padre nuestro que estás en
el cielo, santificado sea tu
Nombre; venga a nosotros
tu reino; hágase tu voluntad
en la tierra como en el cielo.
Danos hoy nuestro pan de
cada día; perdona nuestras
ofensas, como también
nosotros perdonamos a los
que nos ofenden; No nos
dejes caer en tentación, y
líbranos del mal.
Amén.
Dios te salve María,
llena eres de gracia
El Señor es contigo,
bendita tu eres
entre todas las mujeres,
y bendito es el fruto
de tu vientre, Jesús.
Santa María, Madre de Dios,
ruega por nosotros
pecadores, ahora y en la
hora de nuestra muerte,
Amén.
Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo. Como era en el principio,
ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén.
9. ORACION AL ESPIRITU SANTO
Santo y Santísimo Espíritu de Amor, Don del Altísimo, Huésped de
las almas, óptimo y eficaz consolador; consuelo en el llanto,
descanso en el trabajo, plácida sombra en el tenaz calor.
Tú, tan generoso en dádivas. Tú, poder de la diestra paternal. Tú,
promesa magnífica del Padre, que al torpe labio vienes a soltar. Con
tu luz ilumina los sentidos. Los afectos inflama con tu amor. Siendo tú
nuestro guía, toda culpa logremos evitar.
Dénos tu influjo conocer al Padre. Dénos también al Hijo conocer. Y
en el uno y en el otro Santo Espíritu para siempre creer.
Qué atractivo es para un alma el verse en el abismo de tu bondad, y
toda llena de tus inefables consolaciones. Oh si una gota de ellas es
tan gustosa, ¿cuánto más será cuando Tú mismo las concedas como
un torrente sin medida y sin reserva, hablándonos claramente en tu
gloria el cielo?
¡OH, qué trato, qué belleza, qué luz!
10. Santo, Santo, Santo, es el Señor Dios rey del Universo. Llenos están los cielos y la
tierra de la majestad de tu Gloria.
Santo, Santo, Santo, es el Señor Dios rey del Universo. Llenos están los cielos y la
tierra de la majestad de tu Gloria.
Santo, Santo, Santo, es el Señor Dios rey del Universo. Llenos están los cielos y la
tierra de la majestad de tu Gloria.
Padre nuestro que estás en
el cielo, santificado sea tu
Nombre; venga a nosotros
tu reino; hágase tu voluntad
en la tierra como en el cielo.
Danos hoy nuestro pan de
cada día; perdona nuestras
ofensas, como también
nosotros perdonamos a los
que nos ofenden; No nos
dejes caer en tentación, y
líbranos del mal.
Amén.
Dios te salve María,
llena eres de gracia
El Señor es contigo,
bendita tu eres
entre todas las mujeres,
y bendito es el fruto
de tu vientre, Jesús.
Santa María, Madre de Dios,
ruega por nosotros
pecadores, ahora y en la
hora de nuestra muerte,
Amén.
Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo. Como era en el principio,
ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén.
11. A Ti Padre creador y dueño de todo cuanto
existe; a Ti Hijo Único del Padre, a Ti Espíritu
Santo Consolador, Santa e Indivisa Trinidad, de
todo corazón te adoramos, te bendecimos y te
damos gracias.
A Ti se dé la gloria por infinitos siglos de los
siglos. Amén.
Bendígamos al Padre al Hijo y al Espíritu Santo.
Ensalcémoslos con himnos por los siglos de los
siglos.
Amén.
ANTIFONA
12. Dios Uno y Trino a quien
tanto Arcángeles, Querubines
Angéles y Serafines
Dicen Santo, Santo, Santo.
Porque sois Uno en esencia
y Trinidad en personas,
a cuyos pies sus coronas
rinde toda inteligencia,
y porque vuestra presencia
inspira el gozo y encanto.
Porque sois Padre fecundo,
que gozándoos ab aeterno
engendrais un Hijo tierno
como fue el que vino al mundo
con respeto el más profundo
entona el cielo en su canto:
Ángeles y Serafines
dicen Santo, Santo, Santo.
Porque sois Verbo Divino
Semejante e igual al Padre
y porque elegisteis Madre
para encarnar peregrino
y elevar nuestro destino
al Paraíso de encanto.
Porque sois llama inmortal
Espíritu puro increado
solamente dimanado
de amor paterno filial
consolador del mortal
qué yace anegado en llanto.
Porque vuestra Omnipotencia
de todo el mundo admirada
saca seres de la nada
y conserva su existencia
y porque nada limita
vuestra Luz oh Numen Santo.
Porque sois Suma Bondad
amor personalizado
en dones inagotado,
que perdonáis la maldad
y porque en la eternidad
en Ti gozaremos tanto.
Porque sois por excelencia
Santo Dios, fuerte, inmortal.
Líbranos de todo mal,
por esta beneficiencia,
de tu Divina clemencia
que calma nuestro
quebranto.
GOZOS
Dios Uno y Trino a quien
tanto Arcángeles, Querubines
Angéles y Serafines
Dicen Santo, Santo, Santo.
Ángeles y Serafines
dicen Santo, Santo, Santo.
Ángeles y Serafines
dicen Santo, Santo, Santo.
Ángeles y Serafines
dicen Santo, Santo, Santo.
Ángeles y Serafines
dicen Santo, Santo, Santo.
Ángeles y Serafines
dicen Santo, Santo, Santo.
13. "9. ..."Señor, Señor, rey todopoderoso, todo está en tus manos, y no hay quien
pueda oponerse si tú quieres salvar a Israel. 10. Tú has creado el cielo y la tierra
y las maravillas que hay bajo el firmamento. 11. Tú eres el Señor de todas las
cosas, y nada hay que pueda oponerte resistencia, Señor."
15"Y ahora, señor y rey, Dios de Abrahán, ten piedad de tu pueblo, pues proyectan
nuestro exterminio y desean acabar con tu antigua heredad. 16. No desprecies tu
propiedad, que rescataste de Egipto. 17. ¡Oye mi oración y sé propicio a tu pueblo!
Cambia nuestro luto en alegría, y viviremos cantando a tu nombre, Señor. No
permitas que enmudezcan las lenguas de los que te alaban".(Ester, 13 9:11- 15:17)
Tu has dicho 7. "Pedid y se os dará; buscad y encontraréis; llamad y se os abrirá. 8.
Porque todo el que pide recibe, y el que busca encuentra y al que llama se le abre."
(Mateo, 7 7:8) 22"Todo lo que pidáis en oración con fe lo recibiréis"." (Mateo, 21 22)
"12. "Os aseguro que el que cree en mí hará las obras que yo hago y las hará aún
mayores que éstas, porque yo me voy al Padre; 13. y lo que pidáis en mi nombre, yo
lo haré, para que el Padre sea glorificado en el hijo. 14. Lo que pidáis en mi nombre,
yo lo haré"." (Juan, 14 12:14)
Escucha pues nuestras oraciones. Perdona nuestras culpas. Aleja de nosotros los
castigos que merecemos y has que nuestro llanto se convierta en alegría, para que
viviendo alabemos tu Santo Nombre y continuemos alabándolo eternamente en el
cielo. Amén.
Bendita sea la Santísima Trinidad, que todas las cosas crea y gobierna.
Bendígamos al Padre, al Hijo y al Espíritu Santo.
Ensalcémoslos con himnos por los siglos de los siglos. Amén
ORACION FINAL
Para implorar la misericordia divina
14. Señor Dios eterno: alegres te cantamos, a Ti nuestra alabanza.
A Ti Padre del cielo te aclama la creación.
Postrados ante Ti los ángeles te adoran, y cantan sin cesar.
A Ti Señor te alaba el coro celestial de los apóstoles –la multitud de los profetas
te enaltece- y el ejército glorioso de los mártires te aclama.
A Ti la Iglesia Santa –por todos los confines extendida- con júbilo te adora, y
canta tu grandeza.
Padre infinitamente Santo.
Hijo eterno, Unigénito de Dios.
Santo Espíritu de amor y de consuelo.
9. "Salva a tu pueblo, bendice a tu heredad, sé tu su pastor y guíalos siempre"
(Sal 28, 9)
"Todos los días te bendeciré, alabaré tu nombre por siempre jamás." (Sal 145, 2)
Dígnate Señor guardarnos del pecado en este día. (Tedeum, 26)
"3. Ten piedad de nosotros, Señor, ten piedad de nosotros," (Sal 123, 3)
"22. Que tu amor, Señor, venga sobre nosotros, como lo esperamos de ti."
(Sal 33, 22)
"1. A ti, Señor, me acojo: que jamás quede yo defraudado;" (Sal 71, 1)
Amén.
HIMNO DE ACCION DE GRACIAS
15. Omnipotente y sempiterno Dios, que te dignaste
revelar a tus siervos el misterio de la Santísima.
Trinidad, y has enviado al mundo a tu Hijo para
redimirnos y salvarnos, concédenos profesar
siempre la fe verdadera, vernos libres de los
peligros y de las adversidades; llevar una vida
totalmente de tu agrado, y cantar para siempre
tus alabanzas en el cielo.
Te lo suplicamos en el nombre de Jesucristo tu
Hijo, quien contigo y el Espíritu Santo vive y reina
por los siglos de los siglos.
Amén.
OREMOS
16. Según la intención del Sumo Pontífice, para
ganar las indulgencias:
Padre nuestro que estás
en el cielo, santificado
sea tu Nombre; venga a
nosotros tu reino; hágase
tu voluntad en la tierra
como en el cielo. Danos
hoy nuestro pan de cada
día; perdona nuestras
ofensas, como también
nosotros perdonamos a
los que nos ofenden; No
nos dejes caer en
tentación, y líbranos del
mal.
Amén.
Dios te salve María,
llena eres de gracia
El Señor es contigo,
bendita tu eres
entre todas las mujeres,
y bendito es el fruto
de tu vientre, Jesús.
Santa María, Madre de
Dios, ruega por nosotros
pecadores, ahora y en la
hora de nuestra muerte.
Amén.
17. Dios te salve, Reina y Madre, madre de misericordia, vida y
dulzura y esperanza nuestra:
Dios te salve, a ti llamamos los desterrados hijos de Eva;
a ti suspiramos, gimiendo y llorando en este valle de
lágrimas.
Ea, pues, Señora abogada nuestra, vuelve a nosotros esos
tus ojos misericordiosos y después de este destierro,
muéstranos a Jesús, fruto bendito de tu vientre.
¡Oh clemente! ¡oh piadosa! ¡oh dulce y siempre Virgen
María!
V. Ruega por nosotros santa Madre de Dios,
R. Para que seamos dignos de alcanzar las promesas y
gracias de nuestro Señor Jesucristo.
Amén.
POR LA CONVERSION DE LOS PECADORES
En el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo
18. Creo en ti, Señor, pero ayúdame a creer con firmeza; espero en ti, pero ayúdame a
esperar sin desconfianza; te amo, Señor, pero ayúdame a demostrarte que te quiero; estoy
arrepentido, pero ayúdame a no volver a ofenderte.
Te adoro, Señor, porque eres mi creador y te anhelo porque eres mi fin; te alabo, porque
no te cansas de hacerme el bien y me refugio en ti, porque eres mi protector.
Que tu sabiduría, Señor, me dirija y tu justicia me reprima; que tu misericordia me consuele
y tu poder me defienda.
Te ofrezco, Señor, mis pensamientos, ayúdame a pensar en ti; te ofrezco mis palabras,
ayúdame a hablar de ti; te ofrezco mis obras, ayúdame a cumplir tu voluntad; te ofrezco
mis penas, ayúdame a sufrir por ti.
Todo aquello que quieres tú, Señor, lo quiero yo, precisamente porque lo quieres tú, como
tú lo quieras y durante todo el tiempo que lo quieras.
Te pido, Señor, que ilumines mi entendimiento, que fortalezcas mi voluntad, que purifiques
mi corazón y santifiques mi espíritu.
Hazme llorar, Señor, mis pecados, rechazar las tentaciones, vencer mis inclinaciones al
mal y cultivar las virtudes.
Dame tu gracia, Señor, para amarte y olvidarme de mí, para buscar el bien de mi prójimo
sin tenerle miedo al mundo.
Oración del Papa Clemente XI
19. Dame tu gracia para ser obediente con mis superiores, comprensivo con mis inferiores,
solícito con mis amigos y generoso con mis enemigos.
Ayúdame, Señor, a superar con austeridad el placer, con generosidad la avaricia, con
amabilidad la ira, con fervor la tibieza.
Que sepa yo tener prudencia, Señor, al aconsejar, valor en los peligros, paciencia en las
dificultades, sencillez en los éxitos.
Concédeme, Señor, atención al orar, sobriedad al comer, responsabilidad en mi trabajo y
firmeza en mis propósitos.
Ayúdame a conservar la pureza de alma, a ser modesto en mis actitudes, ejemplar en mi
trato con el prójimo y verdaderamente cristiano en mi conducta.
Concédeme tu ayuda para dominar mis instintos, para fomentar en mí tu vida de gracia,
para cumplir tus mandamientos y obtener mi salvación.
Enséñame, Señor, a comprender la pequeñez de lo terreno, la grandeza de lo divino, la
brevedad de esta vida y la eternidad futura.
Concédeme, Señor, una buena preparación para la muerte y un santo temor al juicio, para
librarme del infierno y obtener tu gloria.
Por Cristo nuestro Señor. Amén.
Oración del Papa Clemente XI
20. En el velo de las Tres Divinas Personas
me vea yo envuelto.
Que ni herido, ni preso,
ni muerto, de los enemigos de mi alma y
cuerpo. Que ellos sean vencidos.
Ojos tenga no me vean,
pies no me alcancen
manos no me ofendan,
que tan escondido me vea
ahora y siempre, noche y día,
como estuvo el Divino Verbo
en el vientre virginal de la Virgen María.
Amén.
Jesús, María y José.
ORACION DE PROTECCION
21. ab aeterno.
Loc. lat.
1. loc. adv. Desde la eternidad.
2. loc. adv. Desde muy antiguo o desde
mucho tiempo atrás.
contrición.
Del lat. contritio, -ōnis.
1. f. Arrepentimiento de una culpa cometida.
2. f. Rel. En el catolicismo, dolor de haber
ofendido a Dios, por el amor que se le tiene.
ensalzar.
Del lat. *exaltiāre.
1. tr. engrandecer (‖ elevar a grado o
dignidad superior).
2. tr. alabar (‖ manifestar aprecio o
admiración). U. t. c. Prnl.
inefable.
Del lat. ineffabĭlis 'indecible'.
1. adj. Que no se puede explicar con
palabras.
Iniquidad.
Del lat. iniquĭtas, -ātis.
1. f. Maldad, injusticia grande.
GLOSARIO
Tomado de la 23a Edición del Diccionario de la Lengua Española – Edicion del Tricentenario
numen.
Del lat. numen.
1. m. Deidad dotada de un poder misterioso y
fascinador.
2. m. Cada uno de los dioses de la mitología
clásica.
sempiterno, na.
Del lat. sempiternus.
1. adj. Que durará siempre; que, habiendo
tenido principio, no tendrá fin.
tedeum.
Del lat. Te Deum 'a ti, Dios', primeras
palabras de este himno.
1. m. Himno litúrgico solemne de acción de
gracias de la Iglesia católica.
22. NOTA: Cada vez que se reza la Novena
al Espíritu Santo o el TRISAGIO, se
gana INDULGENCIA parcial (o sea se
perdona una parte de las penas que
merecíamos por nuestros pecados).
Esta indulgencia se puede ofrecer por
las Benditas Almas.
Referencias Biblicas: https://www.bibliacatolica.com.br/la-santa-biblia/